INJUSTICIA

miércoles, 21 de mayo de 2008

2 comentarios  







No miento cuando digo que lloré ayer por la noche delante del televisor. Lloré de rabia, impotencia y dolor al ver a habitantes de Birmania (ese país que ha sido destrozado por el huracán Nargis), corriendo detrás de un camión que repartía comida tirándola por los aires.




...Y luego algún que otro concursante de un reality show como Operación Triunfo se queja porque no le gusta la comida o porque necesita una limpieza de cutis...




Me repugna la capacidad que tiene el ser humano de no valorar lo que tiene.



Son seres ciegos ante la realidad. Estúpidos y egoístas que no ven más allá de sus propias historias.




Anoche, viendo a esas personas desesperadas por el hambre, no cambié de canal. Me impregné de su dolor. Y no por morbo.



Simplemente, porque mi realidad, aunque sea fantástica, está formada por otros trocitos de realidades ajenas a mí que no tienen esa suerte.




Hoy pienso en esas imágenes. Se suceden una detrás de otra en mi mente.



Mejor así. Prefiero vivir con los ojos abiertos.