"IT'S LIKE TEN THOUSAND SPOONS WHEN ALL YOU NEED IS A KNIFE..."
(AUDIO QUE PASEA HOY POR MI MENTE: "IRONIC" DE ALANIS MORISSETTE)
El revisor del tren acabó de contar los asientos vacíos del vagón. 30 en el primero, 33 en el segundo y en este, el tercero, 36. 99 en total. Nadie le mandaba esa orden, que podía resultar estúpida vista desde los ojos de cualquiera, pero sus días estaban llenos de monótonas costumbres, y esa era una de ellas.
Paseó su mirada por el tercer vagón y se encontró con los mismos inmóviles cuerpos de cada mañana. Bautizó a cada uno a su manera. Les puso el nombre que, según él, creía conveniente.
"SONRISA", porque siempre sonreía cuando le pedía el billete, tenía los auriculares puestos y sujetaba el móvil con la mano izquierda. Sus dedos repicaban alguna canción sobre la pantalla del teléfono. Una balada, quizás. Alguna melodía lenta que la hiciera bailar bajo la lluvia de una tarde de sábado...
"NERVIOS" bajó su mochila de la estantería, abrió la cremallera y sacó una verde manzana que, con gesto apresurado y hambriento, colocó entre sus dientes para desayunar a mordiscos el día. Pierna derecha encima de la izquierda, sin parar de moverse. Miraba hacia todos los rincones del vagón, quizás esperando encontrar una misma mirada inquietante que calmara su vida...
"CARICIAS" paseaba sus ojos por la ventana, su novio detenía sus pupilas en ella, con la ternura nacida de sus retinas, de su mano enlazada a la de la chica...
Pedro sintió nostalgia de su mano enlazada a esos dedos, que volaron hacia la espalda de algún infierno...
